• Previene infecciones: El jazmín funciona como un buen desinfectante y antiséptico. Sus componentes cuentan con propiedades antibacterianas, fungicidas, germicidas y bactericidas muy eficaces.
• Reduce la tos: El jazmín ayuda a reducir infecciones en el sistema respiratorio, aliviar los resfriados y la tos cuando se inhala. Además, el aceite de jazmín cuenta con propiedad expectorante que ayuda a expulsar las flemas de las vías respiratorias.
• Trata el insomnio: Las propiedades del jazmín se convierten en una herramienta ideal para ayudar a dormir placenteramente. Su comportamiento antiespasmódico, sedante y expectorante puede ayudar reducir la falta de sueño y los signos de insomnio.
• Protege la piel: El aceite de jazmín está vinculado desde ya hace mucho tiempo al cuidado de la piel, sobre todo a la piel deshidratada, seca y quebradiza. Actualmente se utiliza para el tratamiento de la dermatitis y el eccema.

Beneficios del jazmín

• Alivia la depresión: El olor del jazmín además de tener un olor agradable, tiene efecto estimulante en la mente y capaz de tratar de efectivamente la depresión, haciendo que la persona con pensamientos negativos, los cambie por positivos. El aceite de jazmín ayuda a estimular la liberación de hormonas en el organismo, incluyendo la serotonina, hormona que ayuda a mejorar el ánimo y energía.
• Calma los síntomas menstruales: Ayuda a aliviar problemas propios de la menstruación como los cambios de humor, las náuseas, la fatiga y la molestia. También ayuda a equilibrar las hormonas del cuerpo, regulando el periodo.
• Adiós ronquidos: Ayuda a eliminar  los ronquidos al descongestionar los tractos nasales, mejorando las noches de sueño.
• Ayuda a eliminar cicatrices: El aceite de jazmín es capaz de  ayudar  a eliminar las cicatrices o manchas producidas por el acné, forúnculos y heridas, además ayuda a reducir las estrías producidas durante el embarazo.