+593 2 3980 893

Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
29 11, 2018

Una carta de esperanza

2019-07-07T23:43:31-05:0029 noviembre, 18|

Hola, sé que lo que atraviesas ahora es difícil y duele, pero a veces necesitamos una perspectiva diferente, ¿Y si estuviéramos en un rascacielos y pudiésemos ver todo esto con otros ojos?

Mirar las cosas desde arriba, definitivamente nos da una mejor perspectiva.
Será por eso que los miradores de cada ciudad se encuentran en las cimas.
Que desde la punta alta de un monte, se divisan los mejores paisajes.
Y que desde la altura de la cruz, el mismo Jesucristo fue cuando más nos amó…
Desde arriba, así es como Dios puede mirar nuestra vida.. sin las tantas limitaciones que nosotros vemos en nuestras circunstancias cuando las miramos de frente.
Qué bueno saber que existe alguien «desde arriba», que mira más allá de nuestros ojos, que nos ve con más amor del que nosotros pudiésemos imaginar, y que tiene en su mano todo el control que tú y yo, desde hace rato perdimos…

No importa la circunstancia, Dios sigue siendo Dios, sigue amándote y teniendo sueños para tu vida.
Que el Dios de las alturas, te muestre lo que él vio en ti, y que eso te impulse a perseguir, lo que tienes por delante; yo seguiré aquí, tomándote de la mano.

Te quiero.

22 11, 2018

Carta a mi hijo mayor

2019-07-07T23:43:31-05:0022 noviembre, 18|

Tú fuiste el primero.
Fuiste el primero en escuchar mi corazón desde adentro, seguro sentías cuando se aceleraba de la emoción de escuchar el tuyo en una ecografía, sentías mis emociones como tuyas propias y fuiste la razón para calmarme durante esos nueve meses.
Fuiste el primer recién nacido que tuve en mis brazos. A pesar de ser el primero no tuve miedo de cargarte, eras mío y mi cuerpo se sentía ya preparado para protegerte.
Fuiste el primer ser humano a quien bañé, el primer pañal que cambié fue el tuyo.
Fuiste ese instrumento que Dios me dio para entender a mis propios padres.
Fuiste el primer ser que amé sin conocerlo y ese amor no ha hecho sino crecer durante estos años.
Fuiste quien me puso mi nuevo nombre, “mamá”, y me hace sentir orgullosa de llevarlo.
Fuiste la razón por la que mi vida cambió y no te puedo estar más agradecida.

Gracias.
Gracias por enseñarme el amor.
Gracias por hacerme una mejor persona.
Gracias por ayudarme a entender el amor de Dios.
Gracias por mirarme y por hacerme olvidar de cualquier tristeza o rabia que esté sintiendo.
Gracias por confiar en mí y haberme escogido como tu mamá.
Gracias por entregarme tu vida y darle un nuevo significado a la mía.
Gracias por ser un eterno enamorado de mí, sin importar que esté en el baño, tus abrazos nunca serán inoportunos.

Gracias por amar a tus hermanos.
Gracias por agarrarme la mano cuando vamos en el carro.
Gracias por esos “Te amo, mamá” que sé que te salen del alma.
Gracias por comprender que ahora no soy exclusivamente tuya.

Perdóname.
Por las veces que pierdo la paciencia y me enojo contigo.
Porque no puedo dedicarte ni la mitad del tiempo que te dedicaba antes.
Por no pasar contigo esas horas interminables de juegos y desorden.
Por no poder cargarte todas las veces que me has pedido que lo haga.

Siempre vas a ser el primero, siempre serás mi primer gran amor, y quiero que sepas que gracias a ti me estrené una parte de mi corazón que no había conocido jamás, y esa parte SIEMPRE será tuya.

Te amo.

Tomado y adaptado de: Sos mamá por primera vez /web

15 11, 2018

A mi persona favorita:

2019-09-09T00:12:24-05:0015 noviembre, 18|

Esta es la situación: Yo no te busqué, tampoco te vi venir y cada vez que miro hacia el pasado ni siquiera estoy segura en que momento te convertiste en mi persona, pero ahora cuando miro al futuro, no puedo imaginarlo sin ti.

 

Probablemente debería de darte las gracias por todos los momentos que hemos vivido, y este parece ser el momento indicado para hacerlo. Así que gracias por estar ahí a mi lado a través de cualquier situación, no importa si buena o mala. Ni siquiera has tenido que decir nada. Yo no buscaba una increíble charla o un gran consejo, pero estabas a mi lado cuando yo estaba débil y necesitaba tu ayuda.

 

Gracias por seguir aquí incluso después de conocer mi personalidad tan extraña (y me animaste a quedarme a tu lado después de que me entere que la tuya lo es aún más). Gracias por no abandonarme cuando alguien más lo hacía. Gracias por no juzgarme y decirme lo que necesito escuchar, aun cuando no quería escucharlo. Gracias por fortalecer nuestro lazo.

 

 

Estoy totalmente segura de que cuando tengamos 80 años de edad, nos sentaremos en nuestras mecedoras y recordaremos todas nuestras anécdotas, riendo de todas las locuras que hemos hecho.

 

Cuando pienso en nuestra amistad, ninguna palabra puede describir la relación única que tenemos, es por eso que es tan genuina, y ningún “gracias” podría describir lo agradecida que me siento de tenerte. Hoy entiendo aquello de: “Amigo, hay aún más unido que un  hermano”.

 

Te quiero por siempre.

 

 

8 11, 2018

A su futuro amor:

2019-09-09T00:15:09-05:008 noviembre, 18|

No la acorrales, ella es tan libre que puede convertir cualquier cadena en sus propias alas.

No la juzgues, es tan real que cada día se reconstruye al llegar la noche y es nueva cuando amanece.

No la subestimes, es tan capaz de crear mares en un desierto y un mundo nuevo si se lo propone.

No la dañes, porque en ella hay tanta dulzura, que hasta el ♡ más duro se derrite como cera al fuego.

No le mientas, tienes ojos de alma y discierne lo real de lo falso, y se aleja de lo que le hace daño, ella se ama.

No le exijas, ella siempre entregará más de lo que esperes, te sorprenderá.

En cambio, cuídala, protégela, anímala, bésala, ámala.

Porque estoy segura que cuando llegues a ella, se te acabarán las preguntas…porque ella será la respuesta.

 

Atte.: Su herman@ mayor

31 10, 2018

CARTA A MI BEBÉ

2019-07-07T23:43:31-05:0031 octubre, 18|

No te conozco, ni siquiera sé cómo te voy a llamar. Por sueños te he imaginado y te he visto. Planeo toda mi vida junto ti y ni siquiera sé cómo es tu carita, tu mirada, pero desde ya te amo.

A poco tiempo de enterarme de que tendría un bebé, comprobé lo que me dijo mi mamá alguna vez: “El amor de una madre es único”. Por eso quise hacerte esta carta.

Estoy tan feliz de tenerte dentro de mí. Aunque te confieso que he llorado de temor y alegría; es un mix de emociones y sensaciones.

Estoy pendiente de cada sensación de mi cuerpo. Toco mi pancita y te digo “todo va a estar bien”. ¡Es un amor tan grande y diferente!

Cuando llega la hora de dormir, siempre está en mi la frase: “un día menos para conocerte y un día más junto a ti”.

Juré que cuando fuera mamá, no me iba a poner loquita por ti. Llegué a pensar que era un amor desmedido y hasta “exagerado”. Bueno, bien dicen que cuando conoces este amor, todo cambia.

Gracias hij@ por poner mi mundo de cabeza, porque no te conozco, pero te siento. Gracias por darme de nuevo vida para agradecer y sobre todo creer que los milagros existen; cada día doy gracias al cielo por ti, y confío en que Dios mismo nos dará a papi y a mí, la sabiduría, fortaleza, entrega y compromiso para rodearte siempre.

Desde ya, bienvenid@!

 

Tomado y adaptado de:  Soy mujer- Magazine

25 10, 2018

Una carta para ti, que eres mi orgullo.

2019-07-07T23:43:31-05:0025 octubre, 18|

Cada día me sorprende más tu tenacidad, tu empuje, tu determinación.

 

Tienes un guerrero en el corazón, un alma llena de triunfo, de entrega y fe admirable.

 

Creas, siembras y pronto verás hechos realidad en este plano terrestre, todos tus pensamientos, esas semillas que cuidas y nutres con amor y positivismo, empezarán a brotar de esa tierra fértil que preparaste en todo este tiempo.

 

Verás que las tormentas que pusieron en riesgo tu cosecha, sirvieron para que el fruto creciera más y más fuerte, para llenarlo de nutrientes especiales y así, cuando estén listos para gozarlos, tengan un sabor diferente y se disfruten por mucho tiempo.

 

Te agradezco por hacerme un lugar dentro de ti, por querer compartir tus frutos conmigo, porque desde antes de haberlo hecho, ya me estabas llenando de paz, que tanto necesitaba, gracias.

 

Es raro el amor, es hermoso querer llorar, llorar de tener tanto.

 

De desear darlo a manos llenas, tú inspiras esos sentimientos en mí y te agradezco.

 

Te amo, que tu vida transcurra llena de triunfos, siente ese amor que sale de mi fuente infinita en dirección tuya, llénate de él, que es sincero, puro y que nace gracias a la dicha que Dios me regaló, tenerte a ti.

No olvides nunca, estoy muy orgullosa de ti!

 

Tomado y adaptado por: Mundo Poesía/ Web.

 

11 10, 2018

AL AMOR DE MI VIDA: ¡GRACIAS!

2018-10-11T15:23:03-05:0011 octubre, 18|

Siempre he tenido la idea de que las relaciones son maravillosas. Claro, cada una tiene sus distintas etapas: algunas te enseñan a ser fuerte como pareja, otras logran unirte cada vez más, y algunas de ellas te hacen saber que esa persona es la indicada para pasar el resto de la vida juntos.

Cuando las grandes peleas suceden nunca nos detenemos a pensar en la persona que está a nuestro lado o en la forma en la que llegó a nuestra vida para hacernos felices. Es por eso que hoy puedo decirte todo esto que jamás habría pensado expresar.

Amor, cuando llegaste a mi vida causaste una gran revolución, no importa si terminábamos como pareja o no, tú ya estabas dentro de mi historia. Desde el momento en que te miré sabía que serías el motivo por el cual despertaría en las mañanas y por el que mis días estarían llenos de risas; hasta ahora te has convertido en uno de mis mejores motores para seguir adelante.

Cambiaste toda mi perspectiva, me diste una gran razón para amar la vida, me ayudaste a crecer y a madurar. Te doy gracias porque hasta ahora me has enseñado que cada persona es diferente, que no todos quieren hacernos daño, que a pesar de las malas experiencias, me entregas todo lo que eres y eso me llena de confianza.

Me has ayudado a entender que la vida en pareja no sólo se trata de risas y besos profundos, que también existen las peleas difíciles, pero con amor, atención y respeto cualquier problema se resuelve. Me diste seguridad, derrumbaste esa armadura que me protegía, porque estando a tu lado ya no sería necesaria. Ahora te he dado mi corazón completo y sé que lo cuidas como el tuyo propio.

Tengo que admitir que después de tantas malas experiencias vividas antes de ti, tenía miedo; me sentía aterrada de que esto no funcionara, de que todo se tratara de una mentira cruel, que cada historia que viví en el pasado se repitiera, pero ahora con más fuerza. Gracias a tu corazón tan noble, a tu apoyo incondicional y a todo el amor que me brindas, esa mentira se derrumbó. Pasaste de ser un desconocido a ser el amor de mi vida.

Uniste mi corazón hecho pedazos y lo hiciste latir de nuevo, si no hubiera sido porque Dios mismo te cruzó en mi camino, las sonrisas no hubiesen aparecido de nuevo. Eres la ilusión que atrapa mi corazón. Cambiaste mi vida, la hiciste hermosa, me llenas de una infinita paz y de amor incondicional. Para ser honesta no quiero caminar al lado de nadie más.

Gracias por mimarme, por mirarme y estar en el momento justo y en el lugar indicado para que yo te encontrara, gracias por llegar a mi vida. Por cada beso, cada palabra y cada buen momento que pasamos juntos. Gracias por compartir tus secretos. Gracias por ser siempre tú. Pero sobre todo, gracias por entrar en mi vida en el momento en que más lo necesitaba. Gracias por enseñarme a amarte y por demostrarme que Dios si creó un amor… para toda la vida!

Tomado y adaptado de: okchicas/web

20 09, 2018

Una Carta al Cielo

2019-09-09T00:12:28-05:0020 septiembre, 18|

Bajo esta tibia tarde, quiero tomar el silencio entre mis manos, para que ningún ruido pueda perturbar mi mente y así abrir mi corazón, mi pensamiento y mi espíritu al cielo, a ti Señor.

Hoy necesito orar profundamente, por una persona muy especial, por un ser lleno de virtudes, pero que a veces no los ve; por un corazón noble y bondadoso, por un alma que hoy necesita de tu luz, de tu fuerza, de la fe que viene de ti, para salir adelante con su pesada mochila. Y aunque a veces se aleje por el cúmulo de pedazos rotos, necesita de ti, de tu arrullo, de tu comprensión, de tu buen consejo y de tu infinito amor.

Humildemente te pido Señor, una oportunidad más en su vida, para retomar todo lo que está suelto y que aún no toma su rumbo.

Un viento suave que difumine sus miedos y que, en vez de ellos, le traiga ráfagas de templanza para que la tranquilidad embriague su alma acongojada.

Que pueda encontrar la luz en ti, para que ilumine la confusión de su mente y le dé la claridad para tomar las mejores decisiones.

También te pido, que borre los dolores de su pasado, atenuando sus culpas y lanzando fuera todas sus recriminaciones, para que inicie así un nuevo viaje, mirando solamente hacia delante, pues para adelante se vive; para que no retroceda. Porque sólo ahí está su futuro.

Los remordimientos, lo que no se hizo, en lo que se equivocó, ya no sirve de nada; sólo tomarlos y colócalos en el sótano de su vida, para que duerman de una vez por todas eternamente y no atormenten más su convulsionado día a día.

En esta dulce tarde mi Dios amado, no te pido nada para mí, sólo te ruego por esta persona que tanto amo y que quiero volver a ver feliz, de poquito a poquito sana su corazón y permite que vuelva a encontrar en ti, el sentido y propósito de su vida.

Ya mi alma está feliz, necesitaba hablarte, convenciéndome de que lo que te he pedido, lo escucharás como una súplica de amor.

¡Gracias mi Dios!!

16 08, 2018

Para mi amig@ de la infancia:

2018-08-16T15:29:30-05:0016 agosto, 18|

Has sido parte de mi vida durante tanto tiempo como puedo recordar. Eres parte de cada hermoso recuerdo de mi infancia. Cuando comíamos helado, pasábamos un agradable rato jugando en el parque, compartíamos lo hermoso de nuestro primer amor platónico.

Hemos estado juntos durante etapas difíciles, y sujetaste mi mano cuando las cosas iban mal, te reíste de cada chiste y broma que compartimos, y aún lo haces.

Eres parte importante de mi vida; hemos estado en tantas reuniones familiares que ya somos un miembro más en la familia del otro. A pesar de que en algún momento de nuestras vidas el destino y las circunstancias se encargaron de separarnos, nuestra amistad nunca se debilitó.

Eres la única persona con la que puedo pasar semanas, e incluso meses sin vernos, y al encontrarnos de nuevo es como si nada hubiera cambiado. Podemos sentarnos disfrutando del silencio, apreciando sólo la compañía. También podemos hablar durante horas sin dejar que el mundo exterior interrumpa nuestra conversación. Podemos pelear y dos segundos más tarde olvidarlo todo.

Nuestra amistad no es perfecta: a veces no hemos estado de acuerdo. Puede que no tengamos la misma visión del mundo, quizá no compartimos la misma fe y no hablemos sobre política, pero no importa qué argumentos, retos, opiniones o problemas distintos tengamos, nosotros siempre hemos resuelto cualquier conflicto y nuestra amistad se ha hecho más fuerte.

Abres mis ojos y me das consejos sobre mis errores. Tú me haces ser una mejor persona. Me has visto llorar desconsoladamente y me has visto reír fuerte. Pero lo más importante es que has visto todo y aun así me aceptas como soy.

Gracias por tantos maravillosos años de amistad. He disfrutado cada día desde que nos conocemos. Disfruto cada foto y conversación que hemos tenido. Gracias porque siempre has estado a mi lado. Soy muy afortunada de poder decir que te tengo cerca.

No importa hasta donde nos conduzca la vida, siempre llevaré en mis pensamientos todos los momentos compartidos y siempre te llevaré en mi corazón.

Con amor, quien te conoce desde… que éramos niñ@s.

Tomado y adaptado de: Okchic@s

9 08, 2018

Carta a mi segunda madre

2019-07-07T23:43:32-05:009 agosto, 18|

 

Eres esa mujer aguerrida, compañera, dulce, noble que desde que llegué me cuidó y protegió; eras y sigues siendo la fiel compañera de mamá. Gracias por los cuidados, las aventuras, la compañía. Pensar que tengo tanto que agradecerte que hasta escribirte esta carta siento no será suficiente.

Los cuidados cuando estaba enferma, mis meriendas, las que tú me preparabas, mis favoritas; las tardes jugando a la maestra, al doctor, la niñera o lo que fuera. También nuestras tardes haciendo tarea. Gracias por la paciencia y por explicarme cien veces las cosas, hasta que por fin las comprendiera.

Por las noches, cuando dormía en tu casa contigo a mi lado, los cuentos de nunca acabar que incluían misterio, aunque después no podía dormir. Los chistes, las risas, todo eso que hasta el día de hoy forman parte de mis más lindos recuerdos. Si hablamos de la comida, son un sinfín de ellas las que me han logrado cautivar, las papas rellenas y las sopas, aunque al inicio o de chiquita he de confesar que no eran mis favoritas, todo lo que hacías para mí era un manjar.

Mi compañera fiel en viajes o expediciones del colegio, mientras mamá trabajaba; a la que no le importaba sacrificarse por acompañarme y hacer de mi niñez la divertida y locuaz aventura que fue. Esa mujer que pocas veces dice “te amo”, pero cuando lo hace sabes que lo dice de corazón; esa que siempre estará para mi sin importar lo que pase.

Ahora, ya de adulta y solo un poco más grande, quiero que sepas lo mucho que te amo. Ahora me toca a mí cuidarte y ser incondicional. Aquí siempre estaré para continuar compartiendo la vida juntas y nuestras aventuras.

Mi amor por ti supera todo lo que puedas imaginar; le pido a Dios me ayude a ser agradecida contigo y devolverte todo lo que has hecho por mí.

Desde el cielo sin duda, me amaron demasiado, ya que me regalaron 2 ángeles, mi madre y tú.

Dios te bendiga siempre, a ti, mi segunda mamá.

Realiza tu donación mediante Transferencia Bancaria

Mi promesa de Donación: Eres parte de HCJB

Donaciones mediante depósito o transferencia:

Realiza tus donaciones directamente o en línea en cualquier agencia del Banco del Pichincha. Cuenta de ahorros Banco Pichincha # 22 02 49 71 71
Para transferencias bancarias: Por favor indique el número de RUC 1792518601001 Misión HCJB La Voz de los Andes Ecuador.
Notifique su depósito al correo: [email protected]
¡Atención! Por favor copie bien este número de cuenta y asegúrese de escribirlo correctamente al momento de su depósito.
Haz tu donación en línea con tu tarjeta de crédito o débito nacional o internacional con total seguridad a través de nuestro portal de donaciones Haz clic aquí

Donaciones mediante depósito o transferencia:

Realiza tus donaciones directamente o en línea en cualquier agencia del Produbanco o Servipagos. Cuenta de ahorros Produbanco # 12 00 58 38 84 9
Para transferencias bancarias: Por favor indique el número de RUC 1792518601001 Misión HCJB La Voz de los Andes Ecuador.
Notifique su depósito al correo: [email protected]
¡Atención! Por favor copie bien este número de cuenta y asegúrese de escribirlo correctamente al momento de su depósito.
  • Débito bancario: Realiza tu donación por medio de tu cuenta bancaria del Pichincha o Produbanco llenando los datos solicitados en el formulario. Envía el documento firmado al correo electrónico [email protected] o entrégalo en nuestras oficinas.

Descargar Formulario: Click Aquí