Dentro de nuestro planeta nos encontramos con cientos de milagros de la naturaleza, uno de ellos es la fascinante transformación que sufre una oruga hasta llegar a ser una espectacular mariposa.  Sin duda uno de los espectáculos más impresionantes para todos aquellos que hemos tenido la oportunidad de verlo.

En el caso de las mariposas monarcas; las orugas salen de sus huevos después de cuatro días, estas orugas tienen un aspecto lleno de colores brillantes en color verde, con anillos que pueden ser negros, rojos o amarillos. Posteriormente, la oruga se transforma en crisálida, creando una bolsa protectora donde entran en la fase de metamorfosis, aquí permanecen por un periodo de entre 10 y 13 días. Finalmente, la bolsa se va haciendo transparente y deja ver los primeros colores de la mariposa, de donde emerge como adulto con colores y forma espectacular.

Así de espectacular llega a ser la transformación de nuestra vida cuando Cristo llega a nuestro corazón. Solo su amor basta para cambiar nuestra situación y convertir lo que estaba condenado a muerte en vida.  Saca lo mejor de nosotros, pese a estar sumergidos en medio del fango, del lodazal, de la depravación; su obra redentora nos llena de amor, de luz. Pasamos de ser grandes desiertos a preciosos jardines, de orugas a impresionantes mariposas.

Ese es nuestro deseo, nuestro anhelo como HCJB, que tu vida llegue a ese punto de santidad, perfección, gozo y paz que solo en Cristo puedes tener. ¿Qué tomará tiempo? Como todo lo que vale la pena. ¿Qué costará algunas lágrimas? Nadie dijo que sería fácil, pero sí que él estaría ahí para consolarte y levantarte.

Y como dice su Palabra en Filipenses: Estoy firmemente convencido de que aquel que comenzó en ustedes la buena obra la irá completando hasta el Día de Cristo Jesús.