Continuación de Parte 1

6) Mantener amistades

Empiezo diciendo que las mujeres son muy sociables y buenas en hacer amigos. Sin embargo son muy buenas en perderlos también.

Los hombres sabemos algo, los amigos son amigos ante todo. Las mujeres en cambio son expertas en resentirse, enojarse, guardar rencor y terminar amistades con personas muy buenas por razones muy tontas. La amistad de alguien es un tesoro hermoso que debemos valorar. Hay muy pocas cosas (como la infidelidad) que pueden interponerse a eso. Somos como los perros, una vez que eres mi amigo, lo eres para siempre, sin importar qué pueda pasar

Recuerda, la persona es más importante que sus acciones o errores.

7) Seguir siendo niños

Sí, los hombres somos inmaduros y siempre lo seremos. Cuando tenga 100 años aún me reiré de que le peguen a alguien en la entrepierna o que en los videojuegos el segundo jugador se llame P2.

Los hombres nunca dejaremos de ser niños. Por eso nos gustan los autos rápidos, las motos, las armas y todo eso, son nuestros juguetes. Por eso siempre aceptaremos un reto tonto de nuestros amigos. Por eso siempre nos esconderemos en el closet para asustarlas. Y claro, alguien tiene que ser el adulto de la casa, pero no pierdan ese espíritu joven. Las mujeres a veces olvidan que también hicieron tonterías, nosotros estamos ahí para recordárselo.

8) Preocuparse menos, relajarse

Tienes un problema, ¿qué sucede? Apuesto a que no disfrutas de tu comida, no dejas de pensar en eso y ni siquiera duermes bien.

Si despiden a un hombre del trabajo, ¿qué hace? Probablemente llega a la casa, come un buen poco, se pone a jugar PlayStation y se duerme temprano. A la final ¿qué gana con preocuparse? Sin embargo una mujer llamaría a toda su familia, lloraría en pensar que va a morir de hambre sin poder comprar comida, y no dormiría por pensar en su triste futuro. No te enfoques en el problema, enfócate en la situación. Con una cabeza fría y tranquila vas a ver más soluciones que con un corazón agobiado.

9) Ser Práctico

¿Se rompió la cafetera? Tomamos té. ¿Se fue la luz? Usamos velas. ¿No hay internet? Jaqueamos el del vecino.

No hay que ahogarse en un vaso de agua. Todo tiene solución. Debemos aprender a utilizar lo que tenemos. Nuestros planes nunca van a cumplirse al pie de la letra, no significa que sean fracasos. Podemos sobrepasar las dificultades de maneras creativas y simples si nos aprendemos a ser más prácticos.

10) Ser Orgulloso

Suele ser molesto, pero es mejor alguien que está orgulloso de sí mismo que alguien que a cada rato menosprecia y devalúa su esfuerzo.

Es bueno desafiarse y tratar de mejorarse. Pero recuerda que lo mejor que puedes hacer es dar tu mayor esfuerzo. Si lo hiciste debes estar orgullosa. No importa si está perfecto o no. Si tú estás contenta y orgullosa de tu trabajo se lo vas a contagiar a los demás y va a parecer el mejor trabajo en la historia de los trabajos hechos por alguien.

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Recuerda. No todos los hombres son iguales, y no todas las mujeres son iguales. Pero sí hay patrones que aplican para el común de la población.

Lo bueno es que Dios nos creó diferentes y complementarios. No es cierto que el hombre es mejor porque fue creado primero o que Dios creó al hombre y luego  mejoró su trabajo al crear la mujer. No. Fuimos creados el uno para el otro y debemos aprender a amarnos con nuestras fortalezas y debilidades.