No todos los días estamos con los ánimos arriba, no todos los dias nos vemos a un espejo y nos vemos lindas. Pero tenemos la motivación que Dios nos hizo mujeres para ser reflejo de su amor y cada detalle que cultivamos en el corazón, en el alma, adorna mucho más nuestra belleza física. Porque la alegría del corazón, hermosea el rostro.