El Ing. Victoriano Salvador, en los inicios de la estación, se adhirió al personal técnico de HCJB. Diseñó varios de los primeros transmisores de HCJB, y montó esta unidad de 1000 vatios que salió al aire en 1937.
Salvador era un hombre religioso que trabajó diligentemente en la estación durante muchos años, pero al mismo tiempo, se resistía a abrazar el mensaje del evangelio de Jesús que compartía el personal evangélico de HCJB con los misioneros.
Muchos años más tarde, el corazón de Victoriano se ablandó y se dio cuenta de que necesitaba recibir el don de la gracia de Dios.