El anhelo de un hombre
Los hombres anhelan ser admirados, afirmados y recordados, así que cualquiera de estas carencias resulta crítico para el alma masculina.
Dios le dio al hombre el poder para construir, dirigir e influenciar positivamente en los demás, estas cualidades le sirven como banda transportadora de admiración, afirmación y reconocimiento.
Aun Jesús da muestra de cómo Dios Padre lo afirma vigorosamente con estas palabras. “Éste es mi Hijo. Yo lo amo mucho y estoy muy contento con él”. Mientras tanto, Jesús, una vez que hubo terminado su misión en la tierra -en su oración pastoral registrada en Juan 17-, expresó su gozo de regresar al seno del Padre, quien lo añoraba. Jesús dijo: “Ahora regreso a donde tú estás (Padre). Pero digo esto mientras estoy en el mundo, para que mis seguidores sean tan felices como yo”.
Un hombre se siente aceptado cuando es admirado, afirmado y recordado, por obtener aquello él haría malabares. Conocer parte de esta naturaleza masculina es fundamental para los mimos hombres y las mujeres que los rodean: esposa, madre, hermana, amiga.