A ti, perdóname.

2018-07-19T14:03:42-05:0019 julio, 18|

A ti, perdóname.

Hubo casos en los que mi creencia de superioridad moral me apoyó en agrandar un error de tu parte, me disculpo por haber hecho eso. Lamento que el enojo del momento me haya impulsado a ser cruel con mis palabras, pues hoy sé y comprendo que las palabras pueden lastimar más que un golpe.

Lamento también, si ese fue el caso, haber contado lo sucedido a demasiadas personas en un intento de desahogarme; hoy sé que lo correcto y respetuoso hacia ti hubiera sido dejar el asunto solo entre nosotros dos sin ponerme el traje de víctima. Perdón por todo eso, no tenía plena consciencia de lo que hacía.

Te pido perdón por juzgarte, por no comprender tus motivaciones y lo que había en tu corazón, hoy comprendo que no tuve ningún derecho para hacerlo.

Perdón por lastimarte cuando incumpliste mis expectativas, las expectativas que yo coloqué sobre tus hombros sin consultarte.

Perdón por juzgarte cuando tomaste una decisión que a ti te convenía y a mí no. Perdón por presuponer que tenías que pensar en mi antes que en ti mism@.

Perdón por juzgarte y hacerte villan@ de una historia, solo por no tener mi mismo nivel de resistencia ante los retos.

Perdón por juzgarte cuando te arrepentiste de una decisión de vida, perdón por juzgarte cuando elegiste otro estilo de vida.

Perdón por juzgarte, en silencio, al ver tu nombre en la pantalla o simplemente al escuchar tu nombre. Perdón, porque no eres como yo, y porque esa diferencia es grandiosa en ti y yo no la valoré… pero muchas gracias.

Gracias por existir. Gracias por haber estado en mi vida, por hacerme parte de la tuya y enseñarme tanto de mi humanidad en este proceso.

Te deseo felicidad, que puedas convertirte en la mejor versión de ti mism@, que sigas brillando con tu luz y sigas mostrándole al mundo que eres únic@ y que eso vale más que nada. Serás siempre un genial capítulo en mi libro de vida.

De corazón, gracias por todo y perdón.

 

Tomado y adaptado de: Susana Baizabal -Web