CONTRA LOS HECHOS NO HAY ARGUMENTOS
Entonces los vecinos, y los que antes le habían visto que era ciego, decían: ¿No es éste el que se sentaba y mendigaba?(Juan 9:8) (RVR1960)
No existe mayor argumento en favor del Evangelio que una vida transformada por Jesús. El hombre de nuestros días está cansado de oír teorías y filosofías huecas. Todo el mundo habla, todo el mundo promete, pero las “buenas nuevas” van más allá de la simple teoría. El Evangelio se hace vida, carne, experiencia, sale del romanticismo barato y entra en la vida práctica.
La vida transformada del ciego perturbó a la sociedad de sus días. Había en él algo diferente. Todos lo podían ver. No era tanto lo que él decía, era el hecho incontestable de haber recuperado la visión. Cualquiera puede contradecir tus palabras, pero nadie puede refutar tu vida. Contra los hechos no hay argumentos.
Las vidas transformadas por el mensaje de Cristo continúan en esta época. El cambio puede suceder cuando un hombre quiere mejorar su relación conyugal, laboral o ser un mejor padre… y se deja tocar por el poder inexplicable de Cristo que lo puede todo.
Solo necesitamos abrir nuestro corazón, agudizar nuestros oídos y recibir su propuesta transformadora. Tal vez ya ha golpeado a tu puerta a través de un consejo oportuno que escuchaste en HCJB, por medio de un tema musical o una simple palabra de ánimo cargada de su esencia. Ese cambio que buscas con la ayuda de Dios lo puedes lograr.
Recuerda que cualquiera puede contra decir tus palabras, pero nadie puede refutar tu vida. Contra los hechos no hay argumentos.
AUTOR: John Varela