16 08, 2018

Frustración en la vida

2019-07-07T04:53:24-05:0016 agosto, 18|

Para mantener esos deseos y fuerza para seguir caminando por la vida, tener metas es lo principal. Metas y sueños en diferentes áreas de la vida, como lo son: en lo académico, en lo profesional, en lo familiar, en lo sentimental, en lo espiritual; y cualquier otro ámbito.

De todas esas metas, ¿cuántas hemos podido conquistar? Posiblemente tenemos muchos sueños y metas, pero solo logramos conseguir una o dos. ¿Será malo cumplir tan poco de lo que nos hemos planeado? Lamentarnos de esas metas y sueños no cumplidos o que tardan en cumplirse, nos provocan sentimientos de frustración.

La frustración nos causa amargura y nos impide disfrutar plenamente de las metas y sueños que sí hemos cumplido, haciéndonos centrar en lo que no tenemos, e incluso en ocasiones, nos quita las fuerzas de seguir soñando o de alcanzar las otras.

En cada etapa de nuestra vida, hemos ido alcanzando metas solo que pasan desapercibidas al no darles la importancia que se merecen. Cosas como terminar la escuela primaria. Cuando éramos niños, esa era nuestra principal meta. Ya de adultos, no lo valoramos y quizás ni lo recordamos.

Otro motivo para sentir frustración, está en comparar nuestras vidas con la de los demás. Que si tienen mejores propiedades que nosotros, vidas sentimentales y familiares más estables, y cualquier otra cosa que puedas comparar. Inmediatamente creemos que ellos no tienen carencias o metas sin alcanzar, así que nos frustramos pero lo cierto es que no es así.

Quizás imaginas que personalidades del espectáculo, quienes ganando mucho dinero y siendo muy atractivas; tienen la vida ideal. Curiosamente muchos viven en depresión. A lo mejor porque se han dado cuenta que eso por lo que muchos se desviven, es algo pasajero.

Como decía el Rey Salomón: «Miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu.»

Y como cierra el libro de Eclesiastés: «El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.»

19 11, 2017

Seguir a Jesús

2019-09-09T00:13:06-05:0019 noviembre, 17|

Hay dos tipos de personas en el mundo. Unas se caracterizan por ser visionarias y fijarse grandes metas y otras, (como yo), trabajan lentamente para alcanzar objetivos. Tendemos a celebrar los grandes logros de los visionarios mientras, bueno…continuamos lentamente, pero con empeño.

Es peligroso definir nuestra fe según estos dos modelos de hacer las cosas.  Podemos distraernos fácilmente del propósito de seguir a Jesús, porque nos enfocamos exclusivamente en el proceso de seguirlo. Pablo lo expresó de esta manera: «prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús» (Fil 3:14 LBA).

Los que fijan metas se enfocan en el “qué”, los que le ponen empeño se enfocan en el “hacia”. Pablo tenía una clara comprensión y orientación de la meta a alcanzar: representar y servir fielmente a Jesucristo.

No existe una fórmula o estilo para seguir a Jesús. Se define por nuestro compromiso con la fidelidad, mientras le seguimos y crecemos en El.

Jesús nos advirtió que seguirle sería un desafío, a veces desalentador, y que, en el camino, muchas personas renunciarían. Pero los que permanecen fieles madurarán en su carácter y su recompensa será la satisfacción y el gozo de mantener una relación íntima con el Dios Creador.

En definitiva, el seguir a Jesús, debe tener como único propósito: «conocerle a Él, el poder de su resurrección y la participación en sus padecimientos, llegando a ser como él en su muerte» (Fil 3:10 LBA) Así que la técnica o métodos ​​- es secundario. Lo importante es ¡Seguirlo!

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