Hombre que no cambia se vuelve vulnerable
Un hombre es más vulnerable cuando pierde su elasticidad y se resiste al cambio; sin embargo, la realidad del cambio es un hecho que lo vemos a diario. Si nos volvemos ciegos e inconscientes a esta ley vamos a caer en el espejismo de la seguridad que creemos ver en la comodidad del estatus quo.
Cada etapa de la vida tiene sus propios desafíos y su potencial. En algún lugar próximo, en otra etapa está la sonrisa de contentamiento que voy a exhibir si he manejado correctamente la etapa precedente, dice el escritor y líder norteamericano T.D. Jakes.
Si todo está en movimiento, uno debe moverse estratégicamente pues un logro no garantiza el siguiente, “cada día tiene su propio afán”. Si no sabemos cómo afrontar los nuevos tiempos que suceden de forma constante nos volveremos vulnerables.
La realidad de hoy no será la misma que la de mañana, por ello, debemos prepararnos financiera, espiritual, emocional y relacionalmente para manejar de manera satisfactoria nuestras diferentes etapas. No podemos descuidar los planes para el futuro porque DIOS quiere seguir manifestándose en cada época nueva de nuestras vidas. Él sabe muy bien los planes que tiene para nosotros, son planes para nuestro bien, y no para nuestro mal, para que tengamos un futuro lleno de esperanza, afirma el Señor.