Ánimo 2015

2019-07-07T04:54:00-05:0029 diciembre, 14|

En este nuevo año te invito a que identifiques y explotes tus debilidades para la gloria de Cristo, permíteme aclarar lo que digo: desde el 2007, millones de personas han leído libros y han tomado modelos de listas para encontrar sus puntos fuertes para potenciarlos y los débiles para corregirlos. Estos son útiles para colocar a las personas en los lugares de máxima eficacia.

La pregunta será si Dios obra a través de nuestra debilidad, te hago un llamado, busca tus debilidades, trata de maximizarlas para que de esa forma encuentres el propósito de Dios con ellas, recuerda a Pablo se había dado un “aguijón en la carne”, que era un caso de “debilidad”. ¿Por qué?, simple, él decía… respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate de mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.

Aquí menciona 4 propósitos de sus debilidades:

  • “Para evitar que me volviera presumido”
  • “El poder de Cristo se perfecciona en la debilidad”
  • “Para que el poder de Cristo habite en mí”
  • “Cuando soy débil, entonces soy fuerte”

Pese al aguijón que se le llama “ mensajero de Satanás”, los efectos no son claramente de Satanás, porque él no desea que el poder de Cristo se perfeccione, entonces Dios está invalidando el diseño de satanás con el suyo, porque para Dios las debilidades de sus hijos tienen un propósito y no son casuales.

Podríamos decir que Pablo aseguraba su humildad, para demostrar el poder de Cristo, por esa razón Dios se aseguró de que tuviera para mantenerlo y que no se volviera presumido y darle una experiencia más evidente de que la fuerza de Cristo descansaba sobre él.

Pon esta meta en este 2015

Puedes decir: espero ser humilde y magnificar el poder de Cristo. Si es así, entonces una de las estrategias clave es identificar y explotar tus debilidades, ( dejar de quejarnos y mejor buscar la manera de convertir nuestras debilidades en una experiencia que exalte a Cristo).

Para darte un ejemplo simple, hay gente que juega futbol cinco o diez veces mejor que yo, que he intentado durante años superar esta debilidad de muchas formas. Después de dos décadas intentarlo, vi que no había mejora. Esta es una razón por la que dejé de practicarlo, sabía que no merecía jugar disparatadamente.

¿Qué significó para mí identificar y explotar esta debilidad? Primero que tuve que aceptar esto como el diseño de Dios para mi vida, supe que nunca juagaría bien futbol, lo practicaría de forma regular, ya no me quejaría por ello, dejaría el amor por la práctica de este deporte y haría lo que pudiera para la gloria de Cristo.

Me dije: si sólo juego lo necesario, lo podré hacer poco pero bien, explotaré la lentitud, le pediré a Jesús que me muestre otras fortalezas para no estancarme en esto, que sea Él quien  magnifique su poder en mí, y enfocaré esta energía en leer libros y entenderlos a profundidad

Ahora, después de todos estos años, yo digo como Pablo: “Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. Ha sido fiel para cumplir su propósito. Él se ha engrandecido en esta debilidad.

Si me hubiera resentido con enojo a Dios todos estos años no hubiera podido ser un profesional, un esposo, un siervo para su gloria, no habría explotado esta debilidad. Se hubiera desperdiciado.

Así que este año, no te centres demasiado en la búsqueda de tus puntos fuertes. Presta atención a identificar y explotar tus debilidades  (Dios no te las ha dado en vano). Identifícalas. Acéptalas. Explótalas. Aumenta el poder de Cristo con ellas.