Conozco que mis palabras pueden construir o destruir, lo he palpado, y sé también que me creaste para bendecir a otros, para llevar esperanza.
Ayúdame por favor:
*A ser sincera delante de la gente.
*A que cuando quiera lastimar porque algo me parezca injusto, o me hayan lastimado a mi primero; mi silencio sea más bello que las palabras duras que pueda pronunciar.
- A tocar el corazón de los que amo con cada gesto y actitud.
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A tener mis ojos abiertos a la bondad y mis manos extendidas a la misericordia.
*A no juzgar, a mirar a través de tus ojos.
- A consolar con amor y sinceridad.
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A perdonar y no buscar vengarme.
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A mirar lo mejor de la gente, a encontrar su tesoro.
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A provocar sonrisas y no lágrimas.
Por sobre todo Señor, ayúdame a entender que soy responsable de todo lo que diga y haga; a reconocer que la sabiduría viene de ti y que sin tu guía nada soy.
Ayúdame, a reflejar tu luz, tu paz y tu libertad; que cuando alguien me vea y me escuche, te vea y te escuche a ti.
Todo esto tú lo has compartido conmigo, ahora es tiempo de que yo lo haga con otros.
De corazón, ayúdame.