Uno de los principales problemas que presentan las chinches de cama es que pueden ser insectos muy resistentes. De hecho, aunque se alimenten cada diez días, pueden llegar a vivir más de un año en estado de aletargamiento a la espera de una fuente para alimentarse.
1. Utiliza frío
Esta opción es sencilla siempre y cuando sea invierno y vivas en lugares fríos para poder bajar la temperatura de tu hogar de forma drástica. Y es que debes enfriar lo suficiente el ambiente durante unas horas para que las chinches mueran.
En invierno, es tan fácil como dejar las ventanas abiertas o sacar al exterior todo el mobiliario que pienses que pueda estar infectado, ya sea el colchón, el somier, la mesita de noche, el cabecero, la ropa de cama… Además, recuerda que para que este método sea efectivo, debes asegurarte de que la temperatura sea tan baja que ronde los 0 ºC.
2. Eliminar las chinches de cama con calor
En el otro extremo, puedes hacer lo mismo que en el apartado anterior, pero con calor. Si en tu zona de residencia no se alcanzan estas temperaturas tan bajas, o no podemos desplazar el mobiliario a un lugar con esas características, siempre puedes eliminar las chinches en casa de forma natural a través del calor.