En el Carnaval de Guaranda se juega con serpentinas, talcos, lociones, flores, confites, polvo y por supuesto agua; es una fiesta animada por comparsas, pregones, contrapuntos, bailes públicos y festival de comidas típicas que forman parte de la cultura carnavalesca.
En los días de fiesta casi nadie duerme y desde las seis de la mañana se empieza a chamuscar los chanchos, cocinar el mote, preparar las humas, la chicha, el dulce de sambo, pan, entre otros. Que se brindará a visitantes o familiares, quienes mojados por dentro y por fuera, pintados la cara con polvo y al son de coplas carnavaleras, disfrazados portando guitarras, acordeones y tambores se unen a esta fiesta popular.
Las coplas brotan con tanta espontaneidad en la provincia que da la impresión que no es el pueblo quien las compone sino que las coplas están allí, que andan por las calles, corren en el agua de los ríos o están sentadas en los quicios de las puertas y en las maniguas del camino en busca de los labios que las canten.