Las nueces contienen una variedad de compuestos naturales y fitoquímicos que investigaciones científicas han demostrado que protegen de la inflamación del intestino y el cáncer de colon.
Ahora, un equipo de investigación de la Universidad de Connecticut (EEUU) ha probado en ratones de laboratorio el potencial curativo de las nueces en los casos de colitis, una enfermedad inflamatoria del colon (el intestino grueso) y del recto, y han descubierto que los ratones alimentados con nueces durante al menos dos semanas sufrieron menos daños en el colon y también se reparó más rápidamente.
De esta forma concluyen que comer nueces puede proteger el colon durante un episodio de colitis ulcerosa y acelera la reparación despué. Eso sí, es posible que sea necesario una buena cantidad: hasta 25 nueces al día durante varias semanas deberían ser consumidas antes de que los efectos protectores comiencen a notarse, según han explicado los investigadores.
Los frutos secos ayudan a reducir el riesgo de hipertensión, de estrés oxidativo y de diabetes y podrían tener un efecto protector contra el declive cognitivo propio de la edad. A esa lista de efectos beneficiosos sobre la salud se añade ahora la evidencia generada por un estudio liderado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal): una dieta rica en frutos secos durante el primer trimestre de embarazo se asocia con mejor desarrollo neuropsicológico de los niños y niñas a largo plazo. La investigación, publicada en European Journal of Epidemiology, se ha realizado en España con más de 2.200 parejas madre e hijo inscritas en las cohortes de Asturias, Guipúzcoa, Sabadell y Valencia del Proyecto INMA.