Limón

El limón es un antibiótico natural y es de los más poderosos y conocidos. Esto se debe a su enorme cantidad de vitamina C, la cual estimula al sistema inmunológico al aumentar la producción de anticuerpos que combatan a los patógenos causantes de la infección. Adicionalmente, el limón tiene ácido ascórbico, un poderoso antiinflamatorio, lo cual permite la eliminación de la flema de manera más sencilla al despejar las vías respiratorias, las cuales se congestionan debido a la reducción del espacio de estas al aumentar de tamaño el tejido.

El limón, además de efectivo, es sumamente versátil. Puede consumirse puro, o bien como ingrediente de una infusión de jengibre, miel, menta y eucalipto, la cual tendría no solo las características del limón, sino de sus acompañantes.

Solución Salina

Una forma rápida de despejar las vías respiratorias es preparando una solución salina. Para ello son necesarias sal y bicarbonato de sodio, los cuales contienen una importante cantidad de minerales que estimulan el correcto funcionamiento del organismo,  mejorando el proceso antiinflamatorio natural del cuerpo.

Además de ello, el bicarbonato es un depurante natural capaz de eliminar toda clase de impurezas y tiene un efecto expectorante. La solución salina debe suministrarse con gotero por las vías respiratorias. Se debe hacer de dos a tres veces al día.

Jengibre

El jengibre es uno de los remedios caseros más adecuados para tratar la flema, debido a su condición antiinflamatoria, antibiótica y su capacidad de ayudar a controlar el calor corporal el jengibre es eficaz para reducir la fiebre que las infecciones suelen ocasionar.

Para consumirlo debe prepararse una infusión en un litro de agua y un trozo de raíz de jengibre. Se puede acompañar de miel y limón, lo que convierte a la mezcla en un poderoso expectorante.