Una de las mejores soluciones naturales contra el vértigo es el jengibre. Consigue mejorar la circulación de la sangre, nivelando la presión y disminuyendo los episodios de mareos. Bastará con preparar una infusión con la raíz de esta planta y tomarla una vez al día. La otra posibilidad pasaría por incorporar el jengibre fresco a tus menús.
El limón también nos permitirá tratar los problemas de vértigo al tratarse de una fruta rica en vitamina C. Combate los radicales libres que pueden provocar los mareos. Bastaría con incorporar a la dieta diaria. Si no te gusta encontrarte su sabor en los platos, puedes ingerir por las mañanas y en ayunas un vaso de agua con limón.
Mira fijamente hacia un punto intentando que la mente se concentre en una zona determinada y alcanzar así la sensación de equilibrio. Con las respiraciones profundas conseguirás calmarte y el oxígeno llegará mejor al cerebro.
En algunas ocasiones el vértigo se produce por la ansiedad o las situaciones de estrés, ya que en el cerebro se acumulan grandes cantidades de dióxido de carbono.