Crema de caléndula: no hay duda que la caléndula destaca por ser una de las plantas más adecuadas para tratar determinadas afecciones de la piel. En la actualidad puedes encontrarla fácilmente en herbolarios y en farmacias, aunque también es posible hacerla fácilmente en casa. De la misma manera que la crema es útil, para tratar y aliviar las manos agrietadas también puede ayudarte el aceite de caléndula.
Áloe vera: el áloe vera es, probablemente, una de las plantas más conocidas y populares que existen a la hora de tratar una grandísima diversidad de problemas y trastornos de la piel. Para obtener su jugo solo tienes que cortar una de sus hojas puntiagudas y dejarla reposar sobre un platito. Luego, tras pasar algunos minutos, ponte un poco de su pulpa en la yema de los dedos y aplícatela en las manos con suaves masajes.
Vinagre: el vinagre es un producto natural útil para restaurar el equilibrio del pH de la piel, al ayudar a retener la humedad. Además, es muy adecuado para exfoliar y suavizar la piel. Para aplicarlo simplemente tienes que poner un poco de vinagre de sidra de manzana en un cuenco y remojarte las manos en él.
Miel y aceite de oliva: ambos ingredientes naturales son sumamente interesantes en el cuidado de la piel, y muy útiles para tratar las manos agrietadas. Para disfrutar de sus cualidades mezcla a partes iguales aceite de oliva y miel. Luego aplícatelo sobre las manos y deja actuar durante 15 minutos. Finalmente retira con agua tibia.