Agrega una pequeña cantidad de frambuesas a tu desayuno si quieres prevenir, o incluso revertir, la diabetes tipo 2.
Comer 125 g (menos de una taza) de frambuesas cada mañana puede reducir las posibilidades de desarrollar diabetes, incluso en personas que ya están en riesgo, como las que tienen sobrepeso o son obesas y ya muestran signos de resistencia a la insulina.
Las bayas también pueden reducir los niveles de azúcar en la sangre en los diabéticos después de haber ingerido una comida, según se desprende de dos nuevos estudios.
Las frambuesas son ricas en polifenoles, antioxidantes que también protegen contr cáncer, enfermedades del corazón e inflamación general.
Los dos nuevos estudios se centraron en el impacto de la fruta en la diabetes. El primero probó a un grupo de 32 personas que eran prediabéticas y les dio 125 g o 250 g de frambuesas rojas durante tres días junto con un desayuno alto en carbohidratos, que generalmente hace que el cuerpo libere más insulina para descomponer los azúcares. Como control, a un grupo de personas sanas se les dio el desayuno sin frambuesas.
Ambas cantidades de frambuesas «redujeron significativamente» los niveles de insulina, concluyeron los investigadores del Instituto de Tecnología de Illinois.