INGREDIENTES (4 personas)
- 1 taza de mellocos
- 4 cucharas de maní
- 1 cebolla larga
- 1 diente de ajo
- 2 tazas de leche
- 1 cucharadita de ghee (mantequilla clarificada y filtrada)
- 1 manojo de cilantro
PROCEDIMIENTO
Cocinar el melloco entero por 10 minutos, cortar luego de cocinados, así tendremos menos perdida de nutrientes.
Mientras tanto en un sartén sofreír con un poco de ghee, la cebolla larga cortada en brunoise (cuadrados), el ajo machacado, una pizca de comino y sal.
Añadir la leche licuada con el maní tostado y pelado, cocinar a fuego bajo por 15 minutos para que espese, a los últimos 3 minutos añadir el melloco cortado para que suelte el sabor.
Colocar un poco de cilantro picado.
APORTE NUTRICIONAL
Seguramente cuando eras niño el melloco no era uno de tus alimentos favoritos, y su consistencia gelatinosa, suavidad y otras texturas hacen que para muchos no sea de los alimentos más preferidos.
Sin embargo, el melloco bien preparado no solo puede tener un sabor delicioso, sino que sobre todo posee un valor nutricional excepcional que le han hecho merecedor del patrimonio alimentario del Ecuador.
El melloco es el segundo tubérculo en importancia en nuestro país.
El melloco por sus propiedades se ha usado dentro de la medicina ancestral indígena para tratar gastritis o acidez estomacal, esto debido a la presencia de la “baba” que se dice puede regenerar tejidos dañados, aun cuando no existen suficientes estudios científicos para asegurar esto, se lo sigue empleando para estos fines.
Tiene un alto contenido de carbohidratos y proteínas, un correcto porcentaje de fibra, vitaminas y minerales como el fósforo.
Al mantener una fuente de energía estable y sin elevar la glucosa en sangre, antes de que lleguen carbohidratos como el arroz y el trigo, se usaba como fuente de energía diaria en la alimentación ancestral. A diferencia del arroz y el trigo que mantienen un Índice glucémico alto.
Rubén Mosquera
Director Nutrichefsitos
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Quito-Ecuador
