Hay varias formas de eliminar las espinillas con bicarbonato de sodio, pero una de las más sencillas y efectivas es usar este producto de manera aislada y a modo de tratamiento localizado. El procedimiento es muy fácil, tan solo tienes que hacer lo siguiente:
Haz una mezcla con 2 cucharadas de bicarbonato de sodio con 2 cucharadas de agua. Remueve hasta conseguir una pasta homogénea.
Lava bien piel con agua y jabón antibacterial.
Aplica la pasta de bicarbonato sobre la espinilla que desees eliminar.
Deja que el tratamiento actúe durante unos 15 minutos.
Pasado ese tiempo, enjuaga con abundante agua y aplica una crema hidratante en la zona.
Hay quien prefiere dejar actuar el tratamiento durante toda la noche, pero esto podría provocar una resequedad importante en la piel, por lo que si tienes la piel seca, no es muy aconsejable que lo hagas.