- Actúa con calma, sin pánico; la espina es demasiado pequeña para cortarte la respiración.
- No le des palmadas en la espalda ni en la garganta, ni tampoco apliques la maniobra de Heimlich, así lastimarías aún más la mucosa.
- No intentes empujar la espina con comida dura, como a veces se aconseja hacer, esto puede meterla aún más profundamente a los tejidos o quebrarla, entonces será más difícil retirarla.
- Tosecon cuidado, si la espina no está muy profunda, puede ayudar. Si el dolor se intensifica, deja de toser.
- Si tienes unas pinzas largas (15-20 cm), elimina la espina con ellas, probablemente esté en una zona visible. Toma un espejo y una linterna y examina tu garganta o, mejor aún, pide que alguien lo haga.
- Bebe agua. No te preocupes por tu estómago, digerirá la espina rápidamente sin lastimarlo.
- Traga algo suave que pueda mover la espina del lugar y eliminarla de la garganta: un plátano, un malvavisco, pan con mantequilla de maní, arroz cocido, puré de patatas. Lo importante es que la comida esté bien humedecida con la saliva, agua o aceite.
- Bebe aceite vegetal tibio, así será más fácil que la espina se resbale. El aceite también envuelve la garganta y ayuda a quitar la inflamación.
- Tal vez incluso después de haber ido con el doctor te parecerá que la espina permanece en el mismo lugar. No te preocupes, es un efecto temporal.
- Para deshacerte de esta sensación, toma una ducha tibia, esto te ayudará a suavizar la garganta y a relajar los músculos.
- Come algo suave, por ejemplo, avena.
- Haz gárgaras con cualquier antiséptico para que la herida en la garganta no se inflame.
Ofelia Diaz de Simbaña
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