Es común pensar en el chocolate como un postre o dulce que no debe comerse a primera hora del día. Sorprendentemente, ocurre todo lo contrario. Incluir un poco de chocolate oscuro antes de iniciar actividad escolar, favorece el aprendizaje de los niños, de acuerdo con la especialista en neuropatología y neurotoxicología e investigadora de la Universidad del Valle de México (UVM), Lilian Calderón Garcidueñas.
Esta propiedad tiene como principal origen el poder de los flavonoles de cacao, los cuales funcionan como nutracéuticos con actividades neuroprotectoras, asociadas con la contaminación del aire. Según la investigación de Calderón Garcidueñas, las exposiciones agudas y crónicas a los contaminantes de origen vehicular se han vinculado con el desarrollo y la progresión de enfermedades crónicas.
De igual forma, provocan problemas en el correcto crecimiento y desarrollo del cerebro. En este sentido, los niños que viven en zonas urbanas, están expuestos todo el año a concentraciones significativas de ozono y material particulado, lo cual se ve reflejado en el deterioro de la atención, la memoria a corto plazo y el déficit en la capacidad de aprendizaje.
Ideas saludables:
Para empezar el día
Un bol de papilla de cereales al cacao.
Una taza de leche con chocolate en polvo con galletas —o una tostada—.
A media tarde
Un bocadillo con onzas de chocolate.
Un batido hecho con leche de crecimiento y chocolate.
Un bizcocho o un pan casero con pepitas de chocolate.
Un yogur mezclado con cacao en polvo.
El chocolate es un ingrediente saludable, siempre y cuando se consuma en las porciones adecuadas. Si tienes dudas, consulta a un especialista en nutrición.