… sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.
1 Timoteo 6:17b
Ambas palabras son bellas y encierran tanta plenitud. Por un lado la vida, que en sí misma es un don divino y un tesoro que debemos cuidar, no basta solo con respirar, hay que aprender a vivir y a disfrutar cada experiencia que nos hace sentir vivos, tanto las risas como las lágrimas, y en todo descubrir que la vida es una suma de vivencias. Por otro lado la palabra disfrutar; se asocia con placer, bienestar, contentamiento y unido a la vida se convierte en una elección, la decisión de vivir con la actitud correcta; buscar siempre lo bello de la vida aún en momentos difíciles.
¿Qué conforma esta actitud de vida? A mi parecer hay algunos ingredientes que unidos nos llevan a una plenitud.
Si reconocemos que la vida es un don de Dios, un regalo de amor, esto nos debe llevar a ser agradecidos y responsables de la forma en que vivimos, iniciar cada día dando gracias y dormir agradecidos. La gratitud nos asegura ser humildes y enseñables.
- Valorar la vida, no podemos desperdiciarla en vicios o excesos que la ponan en riesgo, mas bien guardarla como un tesoro, como canta el español Marcos Vidal: ¨somos frágiles criaturas en un mundo sin igual¨. Cuando valoras tu vida tienes una sana autoestima que se evidenciará en todas las áreas; tus relaciones, tu trabajo, tus metas, logros . . .
- Decide amar, no te amargues la vida con relaciones rotas, ni encadenado o esclavizado al pasado, no te esclavices a recuerdos tristes u obscuros, perdona y decide amar, somos personas capacitadas para amar, porque esta es nuestra primera necesidad, sé libre y ama con madurez con nobleza y compromiso, que amar sea el motor de tu vida.
- Sueña con Dios y proyecta tu vida a metas, pues Dios puso en cada ser humano el anhelo de trascender, esa semilla de vida que vamos sembrando a nuestro alrededor, deja que tu vida deje huella, pues nacemos para marcar la diferencia. Nadie es indispensable pero todos somos necesarios, decide vivir cumpliendo el sueño que Dios tiene para ti, así se hace historia.
- En la sencillez y humildad de corazón uno disfruta lo bello del amacecer, atardecer, una sonrisa, un poema, una canción, un rico postre, una fruta deliciosa, una mirada de amor, en fin lo que no se compra es porque no tiene precio y es lo que marca nuestra vida.
- La mejor manera de disfrutar de la vida es compartirla. En el libro: ¨Los cinco lamentos de los moribundos¨, Brownie Wave, una enfermera de cuidados paliativos, asegura que una de las cosas que más lamentan los enfermos terminales en su lecho de muerte es haber perdido el contacto con sus amigos y no dedicar el tiempo que se merecían sus seres queridos, por esto he dejado para el final algo fundamental, la mejor manera de disfrutar de la vida es: compartirla, no camines solo, en Génesis lo único que Dios expresa después de terminada la creación, es que ¨la soledad no es buena¨, Dios lo declara, Dios nos creó para relacionarnos y Él nos pone el ejemplo, es tal la relación de amor y unidad en la Trinidad, que tú y yo somos fruto de su amor, por eso no esperes al final para lamentarte, restaura las relaciones quebrantadas, perdona y pide perdón si es necesario. Para y defiende tu derecho a amar y ser amado, disfruta de la vida con la gente que te ama y amas, hoy es el día, disfruta del amor.