La avena es considerada uno de los superalimentos más poderosos que tenemos al alcance y todo se relaciona con sus inigualables propiedades nutricionales y medicinales. Entre las grandes bondades de la avena se destaca por ser un alimento muy accesible, completo y de lo más versátil, si bien la manera más común de consumirla es como cereal; existen otras maravillosas alternativas para obtener sus grandes cualidades.
La infusión de copos de avena es una bebida de lo más saludable, integrarla como un hábito cotidiano facilita la ingesta diaria de avena y de manera específica se relaciona con numerosas bondades, entre las principales se encuentran sus cualidades antiinflamatorias.
Sobre los beneficios de la infusión de avena para la inflamación:
1. Favorece el tránsito intestinal
Una de las principales cualidades digestivas de la infusión de avena, se relaciona con su aporte en hidratos de carbono de absorción lenta y su extraordinario contenido en fibra. Ambos aspectos favorecen y aceleran el tránsito intestinal, y también se relacionan con grandes beneficios para mejorar la absorción de los nutrientes.
2. Un gran aliado en la pérdida de peso
La infusión de avena es un poderoso diurético natural, lo cual se relaciona con su alto contenido en potasio que crea un buen equilibrio con el sodio. Es por ello que consumirla a lo largo del día es un buen remedio natural para eliminar la retención de líquidos y combatir la hinchazón abdominal.
3. Contra el estrés
Normalmente estamos acostumbrados a relacionar el consumo de avena con sus más populares beneficios, que son principalmente los enfocados en el sistema digestivo, la depuración y sus cualidades para facilitar la pérdida de peso. Sin embargo la infusión de avena es un maravilloso aliado para disminuir los altos niveles de estrés, ansiedad, nerviosismo e irritabilidad.
Cómo preparar la infusión de avena?
Ingredientes:
600 ml de agua
100 gramos de copos de avena (de preferencia orgánicos)
1 ramita de canela
1 cucharadita de miel
Recipiente de vidrio con tapa hermética
Modo de elaboración:
En una cacerola mediana agrega el agua y permite su ebullición. Cuando alcance el primer hervor agrega los copos de avena, la ramita de canela y disuelve la miel.
Cocina durante 30 minutos a fuego bajo, revolviendo ocasionalmente. Pasado este tipo tapa la cacerola y permite que este en reposo por 1 hora o más.
Pasado el tiempo de reposo, cuela el líquido y colócalo en un recipiente de vidrio con tapa hermética.
Consejos de consumo:
Procura consumir de 500-1000 ml de infusión de avena a lo largo del día.
Se aconseja beber un vasito caliente en ayuno y continuar con un vaso previo a las comidas principales, tomando en cuenta realizarlo 15 minutos antes de consumir los alimentos. Contempla una taza tibia, antes de dormir.
La recomendación es tener este hábito por 5 días a la semana, sin embargo hacerlo diario es perfectamente saludable y se relaciona con grandes resultados.