A los 8 años, el pastor y misionero Enrique Porras fue cautivado por Cristo. Desde esa edad aprendió que la oración es el medio para conocer a Dios y recibir su guía.
A los 8 años, el pastor y misionero Enrique Porras fue cautivado por Cristo. Desde esa edad aprendió que la oración es el medio para conocer a Dios y recibir su guía.