Un nuevo estudio revela que, una vida más larga podría implicar dedicar un tiempo adicional al ejercicio, más allá de la cantidad recomendada.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los adultos deben realizar entre 150 y 300 minutos de actividad física moderada o entre 75 y 150 minutos de actividad física intensa a la semana. Pero las personas que superan esos niveles viven más tiempo que quienes no lo hacen.
Los investigadores analizaron a más de 116.000 adultos en un estudio publicado en la revista académica Circulation de la Asociación Estadounidense del Corazón.
También es importante señalar que no encontramos ninguna asociación perjudicial entre los individuos que declararon (más de cuatro veces) los niveles mínimos recomendados de actividad física moderada y vigorosa en el tiempo libre a largo plazo”, añadió en un correo electrónico.
Ejemplos de actividad moderada son una caminata rápida, cortar el césped o jugar al tenis, mientras que la actividad vigorosa incluye cosas como el senderismo, trotar o jugar fútbol, según la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard.
Puede hacer una caminata enérgica al aire libre o en la cinta de correr, hacer cuatro series de una secuencia de ejercicios de tres minutos con el peso del cuerpo, practicar posturas de yoga o elegir tres canciones alegres para bailar.