Prevenir los juanetes con remedios caseros
Antes de proponer cualquier remedio casero para los juanetes, hay que tener en cuenta ciertas consideraciones con el fin de evitar su aparición. Por ello, debemos vigilar constantemente nuestro peso con el fin de evitar un estado de obesidad, consumir vitaminas como la A, la C o la D así como calcio para fortalecer nuestros huesos, usar calzado con la punta ancha y realizados con materiales blandos a la par que flexibles y, en su caso, utilizar espaciadores para evitar la presión excesiva que los dedos puedan ejercer entre sí.
Masajear el área afectada con aceite de lavanda supone uno de los remedios caseros más efectivos para combatir el dolor producido por los juanetes. Esta planta contiene propiedades antiinflamatorias, por lo que va a actuar sobre la zona como un excelso relajante. Para elaborar este truco, tan sólo tenemos que mezclar unas flores secas de lavanda con aceite de oliva o de almendras, calentarlas a fuego lento para después colar la combinación resultante y obtener el aceite de lavanda.
Resulta recomendable especialmente en aquellos momentos en los que las molestias se tornen muy intensas, colocando almohadillas eléctricas o compresas de agua caliente sobre el juanete y manteniéndolas en esa posición durante un periodo de unos 15 o unos 20 minutos.