Jesús y la renuncia al “Yo”
“Luego Jesús dijo a sus discípulos:—Si alguien quiere ser mi discípulo, que se niegue a sí mismo, tome su cruz y me siga.” Mateo 16:24
Vivimos en una sociedad que nos dice: “Piensa en ti primero”, “Tú eres lo más importante”. Pero en la cruz, Jesús nos mostró una verdad completamente diferente.Mientras sufría, la gente a su alrededor le gritaba: “Sálvate a ti mismo”, “Si eres el Hijo de Dios, baja de la cruz”. Jesús tenía el poder para hacerlo, pero eligió el sacrificio antes que su propio bienestar. No tenía pecado, no merecía la cruz, pero decidió quedarse allí porque pensó en nosotros antes que en sí mismo.Hoy, la cultura nos impulsa a vivir para nuestro propio beneficio, pero Jesús nos llama a un camino distinto: renunciar al egoísmo y amar como Él nos amó.Amar a los demás es una de las señales más evidentes de que Jesús vive en mi. Decide renunciar al yo como Jesús lo hizo aunque eso implique sacrificio y dolor. Puedes estar seguro de que, al seguir sus pisadas, siempre habrá una recompensa.Esta Semana Santa es un buen momento para preguntarnos: ¿Estoy viviendo solo para mí o estoy dispuesto a negarme por amor a otros.